La chelista española Beatriz Blanco, en el Festival Menuhin de Gstaad
La chelista española comparte cartel en la edición de este año con primeras figuras mundiales como Lang Lang, Valery Gergiev, Maxim Vengerov, Andras Schiff o Katia Buniatishvili.
El Festival Menuhin se ha vestido de gala en esta edición para celebrar el centenario del nacimiento de su creador, el violinista Yehudi Menuhin nacido en Nueva York el 22 de abril de 1916 y fallecido en 1999. El festival, que inició su andadura en 1957 en la localidad de Gstaad a donde Menuhin se había trasladado a vivir ese año, con unos memorables conciertos del violinista junto a Benjamin Britten al piano, se celebra este año entre el 14 de julio y el 3 de septiembre y cuenta con un plantel impresionante de primeras figuras mundiales entre las que se ha encontrado una única española: la chelista Beatriz Blanco.
Presentada por la Fundación suiza Kiefer Hablitzel, cuyo premio de música ganó Beatriz Blanco el pasado año, hizo su presentación en uno de los festivales más prestigiosos del mundo el pasado 23 de agosto con un recital que incluía obras de Bartok, Brahms y Liszt, junto al pianista Federico Bosco. Nacida en Valladolid y residente en Basilea, Beatriz Blanco, desarrolla su carrera por toda Europa y forma parte de la élite de jóvenes músicos españoles que están triunfando internacionalmente. Tras su reciente gira por Italia, tras su paso por el Menuhin Festival, le esperan conciertos en Alemania y Suiza.
Formada en España, Austria y Suiza, Beatriz Blanco ha actuado en algunas de las más prestigiosas salas de Europa como el Theatre des Champs Elysèes (Paris), Victoria Hall (Ginebra) Stadt Casino (Basel), Solitär (Salzburgo), Tonhalle (Zürich), Auditorio Nacional de Madrid, Palau de la Música y L’Auditori de Barcelona o Palau de las Arts de Valencia. Blanco ha publicado esta temporada el CD “A mon ami” junto al pianista Federico Bosco, con obras para chelo y piano de Chopin y Fanckhome, bajo el sello Odradek y el CD “Baroque portrait” con obras de Bach y Bussoni.
Fuente: Da Capo al Fine
