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PABLO FERRÁNDEZ: "UN INTÉRPRETE DEBE ESTAR ABIERTO A TODO TIPO DE OBRAS"

Pablo Ferrández es, desde hace ya algún tiempo, uno de los cellistas más prometedores del panorama nacional. Hace un año se clasifi có cuarto en el prestigioso Concurso Internacional Chaikovski, convirtiéndose en el primer español premiado en dicho certamen. Ahora, con todo ese bagaje sobre sus espaldas, se abre ante él una temporada llena de conciertos y debuts en muchas de las salas más importantes a nivel mundial. Así pues, Ferrández mantiene con Platea una interesante charla, llena del vitalismo que le caracteriza, donde trata desde su privilegiada visión del sector musical hasta sus impresiones como concertista de primer nivel.

Hace algo más de un año tuve ocasión de entrevistarle con motivo de su cuarto puesto en el Concurso Chaikovski. Por aquel entonces, me comentó que su agenda era exigente y cada vez más apretada ¿Continúa con esta tendencia?

Así es. Esta temporada será la más potente a la que me he enfrentado nunca, con más de cincuenta conciertos distribuidos en cuatro continentes. Entre ellos se incluyen, además, múltiples debuts. Tocaré, por ejemplo, en algunas partes de Asia en las que nunca he estado. Lo cierto es que afronto esta temporada con mucha ilusión…

¿Cree que, de no haberse presentado al Chaikovski, habría tenido la oportunidad de acceder a las salas de conciertos por las que se mueve ahora?

Bueno, el concurso te da mucha difusión, no cabe duda; pero a fi n de cuentas no va más allá de eso. Yo particularmente tuve la suerte de fi rmar hace poco para una agencia excelente, conecté muy bien con ellos desde el principio y creo que ellos son uno de los factores que han hecho tan interesante esta temporada. Dado que son las agencias las que buscan los conciertos

¿Hasta qué punto es libre el artista de seleccionar el repertorio que interpreta?

Pues normalmente hay poco margen. Las orquestas te llaman solicitando un repertorio concreto y, entonces, tú sólo puedes aceptar o negarte. En ocasiones te dan carta blanca, permitiéndote proponer tus propias obras, aunque esta es una situación muy poco frecuente.

Así pues ¿resulta beneficioso que un intérprete se especialice en un tipo de repertorio concreto?

Bueno, creo que un intérprete debe estar abierto a todo tipo de obras. Yo personalmente me lo paso muy bien abordando diferentes estilos y no tengo en mente especializarme en uno concreto; creo que me aburriría.

A lo largo de los años ¿han ido cambiando sus planteamientos interpretativos sobre un estilo o una obra determinada?

Desde luego, especialmente desde que tengo la suerte de tocar un Stradivarius. Ahora, por ejemplo, estoy estudiando Schumann, un compositor que tendrá una notable presencia dentro de mi próxima temporada. Así pues, estoy teniendo que abordar sus obras desde un ángulo distinto. A fin de cuentas son mil pequeños detalles técnicos los que finalmente condicionan tu sonido: distintas presiones del arco, velocidades, etc.. Aunque esa fase de adaptación suponga un gran trabajo añadido, no puedes tocar igual en un cello que en otro...

Lee la entrevista con Pablo al completo en la EDICIÓN IMPRESA PLATEA MAGAZINE.

Foto: Pablo Ferrández Official Site.