Cascanueces Baluarte 18 Carlos Quezada

 

Un clásico revisitado

Pamplona. 26/10/2018. Baluarte. Tchaikovsky: El Cascanueces. Compañía Nacional de Danza. Dir. escena y coreografía: José Carlos Martínez. Orquesta Sinfónica de Navarra. Dir. musical: Manuel Coves.

Siempre es un reto enfrentarse a un clásico. El Cascanueces de Tchaikovski y Petipa lo es por méritos propios desde hace más de un siglo. Estrenado en 1892, por encargo de los Teatros Imperiales de San Petersburgo, su música es una de las más reconocibles e inspiradas del compositor ruso, hasta tal punto que ha sido masacrada a menudo sin piedad en numerosos anuncios y spots comerciales. De hecho, junto con El lago de los cisnes y La bella durmiente, es uno de los títulos más célebres de todo el repertorio clásico de danza.

El auditorio Baluarte de Pamplona, desde hace dos años con Félix Palomero como gerente al frente, fue el escenario del estreno de una nueva producción de este ballet, en plena conmemoración del cuarenta aniversario de la Compañía Nacional de Danza, fundada en 1979. A diferencia de lo visto en la Ópera de París hace un par de termporadas, a manos de Dmitri Tcherniakov y coreógrafos como Sidi Larbi Cherkaoui, José Carlos Martínez no ambiciona un montaje de vanguardia; apuesta más bien por un enfoque clásico si bien puesto al día, lejos de la caspa asociada a veces a ciertos convencionalismos.

La propuesta se sostiene con armonía y elegancia, aportando algún elemento innovador como la magia, que desempeña un papel protagonista en los primeros compases de la producción, con el personaje Drosselmeyer. En términos coreográficos, José Carlos Martínez dice haber tomado algo de todas las versiones de El Cascanueces que él mismo ha bailado y visto, para dar forma a su propia propuesta. Martínez busca también un Cascanueces algo más sombrío, recuperando la figura de la reina de los ratones, que Petipa había descartado respecto al original de Hoffman y Dumas. En resumen, esta nueva producción del Cascanueces podría tildarse de tradicional aunque no en un sentido despectivo.

Cascanueces Baluarte18 CarlosQuezada

 

La Compañía Nacional de Danza, en espléndida forma por lo que hace a sus bailarines, exhibió un trabajo detallado y especialmente intachable en el caso de los primeros bailarines: Cristina Casa (Clara), Alessandro Riga (Cascanueces), Ion Agirretxe (Drosselmeyer), Haruhi Otani (Hada Azúcar) y Ángel García Molinero (Príncipe). Por último, la propuesta de este Cascanueces, en términos de escenografía (obra de Mónica Boromello), tiene la virtud de ser modular, con lo que será fácil que este montaje vaya en gira por diversos teatros.

En el foso encontramos un buen trabajo de Manuel Coves al frente de la Orquesta Sinfónica de Navarra. Coves dirige con más precisión que fantasía, lo cual para un ballet como este seguramente sea una virtud más que un demérito, pues otorga seguridad al conjunto de la coreografía en sus ejecuciones. Ciertamente, foso y escena discurrieron en una perfecta sincronía. La Sinfónica de Navarra demostró estar en buena forma, con un sonido cálido y técnicamente muy seguro.