Gugurumbe foto LoloVasco 

Fahmi Alqhai: "Con Gugurumbé nos proponemos reflexionar sobre el mestizaje a partir la música"

El próximo miércoles 15 de julio, el Festival de Granada acoge el estreno de un nuevo espectáculo titulado Gugurumbé. Se trata de un concierto multidisciplinar en el que se podrá disfrutar de la presencia de instrumentistas como Fahmi Alqhai, Antonio Ruz, Rocío Márquez o Núria Rial, entre otros. Grandes nombres de mundos y especialidades diferentes que se unen para interpretar un repertorio diferente tras una época de silencio absoluto. Hemos conversado con Fahmi Alqhai para comentar algunos de los aspectos más relevantes de esta propuesta.

Estamos ante un proyecto al que se supone un largo trabajo previo y que se concreta ahora en una actuación multidisciplinar, ¿Cómo surgió la idea de indagar y preparar en este repertorio?

La verdad es que nosotros llevamos con este tipo de formato bastante tiempo, trabajando en torno a todo el tema del mestizaje. La música española, junto con la música americana y la africana, ha sido una constante en el repertorio que llevamos interpretando desde hace ya tiempo. Para este nuevo espectáculo que presentamos en Granada nos hemos reunido de nuevo con artistas a los que conocemos desde hace tiempo: con Rocío Márquez hemos trabajado desde 2015; con Nuria Rial más o menos igual; con Antonio Ruz también habíamos tenido un proyecto importante con en el que hemos viajado mucho. De alguna manera, este es un proyecto con un aire muy familiar para nosotros, tanto por las personas implicadas como por el repertorio.

Y ahora todo ello se reune en una misma propuesta.

Exacto. Jugamos con la ventaja de que es una música que conocemos bien. No me refiero exactamente a la música que estrenamos el miércoles. Me refiero a que estamos muy familizarizados con este repertorio. No estamos haciendo música rusa del primer barroco. Es una música que tenemos en nuestro estómago. Y los músicos que nos hemos reunido formamos de veras una especie de familia. Hablar de Rocío Márquez es para mí como hablar de una hermana. Con Antonio Ruz he compartido muchas horas… y en general así ha sido con toda la gente de esta plantilla. Son artistas con los que hemos pasado mucho tiempo, muchas actuaciones y muchos viajes, y eso se percibirá en el resultado musical. 

¿Cuáles han sido las fuentes de estudio y los autores de referencia?

Básicamente, el germen de toda la idea parte de la ensalada musical de Mateo Flecha “El viejo”, La negrina, en la que es evidente el mestizaje de la cultura occidental con los rasgos culturales, musicales y dancísticos de los negros. En esa ensalada aparece el término “gugurumbé”, que es una manera jocosa de imitar a como hablaban los negros. Ahí se empiezan a ver los primeros rasgos culturales de occidente, concibiéndolo como Europa y todo lo que nos venía de África. A partir de esta obra hemos creado todo el resto. 

No queríamos enfocar solamente una visión de lo negro, sino que hemos abierto muchísimo el diafragma y nos hemos ido a otras obras a nivel histórico, a las obras de Gaspar Fernández por ejemplo. También hemos cogido como referencia el Códice Trujillo. En este códice hay mucha referencia a la música negra así como mucha evidencia de cómo esas características negras se fueron mezclando poco a poco con otros registros. También hemos incluido música de Xavier Montsalvatge, que es música de un compositor que juega mucho con las habaneras, con la música caribeña, incluyendo estas formas en composiciones más románticas. Y de todas ellas el lazo más natural o más familiar es el flamenco. En mi opinión tiene todas las características del barroco español en referencia a lo negro. Digamos que con esto tendríamos los pilares fundamentales de la música de este proyecto, a falta de enfocar y colocar ésta alrededor de la danza y el baile.

Flamenco, cante vocal barroco, música instrumental… el concierto cuenta con intérpretes de diferentes especialidades. ¿Ha sido difícil combinarlos a todos ellos en torno a un mismo repertorio?

Para mi ha sido como si fuera Ferran Adrià haciendo un plato nuevo o una receta nueva… yo tenía muy claro que Rocío Márquez y Núria Rial tiene mucho en común. Las etiquetas de que Núria es una cantante barroca o de que Rocío Márquez es una cantaora no me sirven. Yo pensaba que la presencia de cada una serviría para un proyecto de este calibre, y la verdad es que funcionan de maravilla. Tienen voces similares, cada una en su estilo pero a la vez muy parecidas. Son voces delicadas, refinadas y muy generosas en el sentido de que se adaptan a cualquier tipo de novedad. Tanto Rocío como Núria son gente muy abierta a nivel personal y tenían ganas de hacer un proyecto que se saliera de la norma. Con Antonio Ruz pasa exactamente lo mismo. Él es una persona que ha tenido mucho contacto con el flamenco. Digamos que su fuerte es la danza contemporánea, por lo que ganó el Premio Nacional, pero le encanta el tema de la música española barroca, y es por eso que llevamos tanto tiempo juntos.

¿Se interpretará con fidelidad a la época barroca o podremos ver adaptaciones?

Yo no se dónde está el límite de una recuperación histórica. Yo siempre intento mantener este tipo de discursos cuando de verdad nos ponemos historicistas, es decir, cuando hacemos un programa de Bach o cuando hacemos algún programa de recuperación de música española. Pero este tipo proyectos, como Gugurumbé, me gusta pensarlos como un evento creativo. No pensamos en cómo se debería interpretar la obra de Gaspar Fernández en el siglo XVII. En un proyecto de este planteamiento no le encuentro mucho sentido. Digamos que el discurso es algo diferente. Para quien quiera escuchar pureza, éste no es su espectáculo. El proyecto tiene mucho de histórico pero también cuenta con la aportación particular de cada artista que está sobre el escenario. Por eso es un proyecto muy bonito, por la posibilidad de desarrollar y crecer en el discurso; y por el hecho de tener a dos grandes cracks en su terreno. Es verdad que hay mucha carga de creatividad y los artistas que están en este proyecto se han elegido por que son grandes músicos y grandes creadores.

¿Podría hablarme un poco más del repertorio que compone el espectáculo?

Partiendo de lo que es la ensalada musical de Mateo Flecha, intentamos combinar diferentes elementos, como con las raíces de las alegrías y los tanguillos. Es algo muy común con ese tipo de músicas. Los ritmos de 6/8, 18/8, etc. Partiendo de ahí hemos pasado por el Códice Trujillo y las obras de Gaspar Fernández. De ahí salen algunas danzas más tipo instrumentales como el fandango, chacona y la jácara. Hemos intentado mezclar con sonidos más modernos. Por ejemplo hemos usado la jácara como elemento más historicista y la hemos combinado con una bulería de Dani del Morón. Lo que hemos hecho es acercar los elementos de cada danza. Lo mismo ha pasado con la chacona y los fandangos. Hay música que se dale un poco de todo esto, como por ejemplo La negra Atilia, que es una composición venezolana contemporánea. Otro punto clave es la obra de Xavier Montsalvatge, las nanas para dormir a un negrito, las habaneras, etc… Con todas estas obra hemos hecho un mosaico referenciado a las raíces negras. 

¿Hay alguien entre los intérpretes que provenga de las “raíces negras”?

No, espero que nadie diga lo de la apropiación cultural… Yo no pienso en este tipo de cosas. Los artistas se han seleccionado por su calidad, no por su origen ni por su relación étnica con el repertorio. 

¿Cómo ha vivido toda esta etapa de confinamiento? Este espectáculo en el Festival de Granada supone la vuelta a la actividad para usted y todo el equipo.

Estamos realmente muy contentos y con muchas ganas de hacer el espectáculo, después de toda esta época oscura que hemos pasado y esperemos que no vuelva nunca. Es verdad que personalmente me ha venido muy bien este tiempo para recuperar fuerzas. A veces este tipo de parones nos hacen falta a los artistas. Cuando estás totalmente metido en esta profesión te olvidas de su esencia, y este tiempo de descanso nos ha venido muy bien para preparar el programa. Agradecemos sobre todo al Festival de Granada, que no se ha rendido y ha seguido hacia delante a pesar de todas las dificultades que se han planteado.

Foto: © Lolo Vasco