220908 Bayreuth Baroque Jeanine De Bique und Concerto Köln 271 c bayreuth.media

Más que un espejismo

Bayreuth 08/09/22. Markgräfliches Opernhaus Bayreuth. Obras de G. F. Händel, C. H. Graun, R. Broschi, L. Vinci y G. P. Telemann. Concerto Köln. Concertino: Y. Ytier. Janine de Bique, soprano. 

Inaugurada la tercera edición del Bayreuth Baroque Festival con el estreno en tiempos modernos de la fastuosa ópera de Leo Vinci: Alessandro nell’Indie, se presentó en recital una de las sopranos actuales más emergentes, sobretodo especializada en el repertorio barroco.

Recital del nuevo trabajo de la soprano de Trinidad y Tobago, Jeanine de Bique (n.1981): Mirrors, editado por Berlin Classics y grabado con Concerto Köln. Supone el debut álbum en solitario de la soprano trinitense, que además acaba de ser premiado en los Opus Klassik 2022 alemanes en la categoría de “Mejor solo álbum de ópera”, imponiéndose a otras estrellas como Joyce DiDonato o Christian Gerhaher.

El recital se basó en el trabajo discográfico. Con una variada mezcla de arias de ópera barrocas donde los contrastes de sus protagonistas, Rodelinda, Cleopatra o Alcina, se reflejan y contraponen en las composiciones de Händel, Graun o Broschi, ofreciendo un variado crisol de música bajo diferentes perspectivas.

Después de una correcta, aunque algo falta de teatralidad barroca, obertura de la ópera Partenope de Händel, por los siempre estilos Concerto Köln, se presentó una radiante Jeanine, enfundada en un vistoso vestido verde, corte de sirena. 

Lo primero que llama la atención de la soprano, es la personalidad musical y artística que transmite. Con un magnetismo y una sinceridad musical más que notorios, de Bique mostró un instrumento aterciopelado, de nacarado timbre, sincera emotividad y expresión, todo envuelto en un ángel especial que la hacen brillar en los contrastes del estilo barroco. 

La primera parte mostró la seductora habilidad de la soprano con un fraseo bien articulado y una emisión característica con un sonido homogéneo en toda la tesitura. De Bique mostró virtuosismo en las variaciones, siempre hacia el agudo y de una fantasía y originalidad dignas de mención, como en la conmovedora “Mi restano le lagrime” de la Alcina händeliana o en la vistosa “L’empio rigor del fato” de la Rodelinda de Graun.

La segunda parte comenzó con la Sinfonía de la Partenope de Leonardo Vinci, donde se volvió a mostrar el estilo de Concerto Köln. Si bien el conjunto siempre fue correcto en sus intervenciones, se echó a faltar más personalidad y contrastes en unas lecturas donde la sobriedad de su concertino, Yves Ytier, no alcanzó la atractiva brillantez de un repertorio que pide espectacularidad y hondura.

De Bique, con tornasolado y amarillento nuevo vestido, compitió con la oboe solista en la célebre y corta aria de la Agrippina de Händel: “L’alma mia”, donde demostró técnica y temperamento. 

Pero fue con dos arias de hermosísima expresión interna donde la cantante de Trinidad mostró sus mejores armas. Con la doliente “Rimembranza crudel” del Germanicus de Telemann, con un notorio trabajo expresivo, lleno de riqueza de colores y matices se alcanzó un punto álgido del recital. Fue lo mejor del concierto la archiconocida “Se pietà”, el lamento de Cleopatra del Giulio Cesare händeliano. La elegancia de la lectura, con un destacado trabajo del fagot solista, la riqueza expresiva del fraseo, la nobleza de la emisión, y unas preciosas variaciones en el da capo, con notables filados en los agudos, supusieron el cenit del recital. Aquí de Bique mostró la actual madurez de su instrumento y de su talla como artista que la han situado entre las solistas más demandadas de su cuerda en el repertorio barroco actual.

Con una radiante “Tra le porcelle assorto” del Cleopatra e Cesare de Graun, finalizó el recital, disponible en el Canal Arte. El público, entregado y seducido por el magnetismo de la soprano consiguió hasta tres bises en un festivo ambiente donde se evidenció que de Bique es mucho más que un espejismo de los nuevos astros del efervescente mundo de solistas especializados en el barroco. Una personalidad y encanto especial que la sitúan entre las figuras artísticas a tener en cuenta en los próximos años. 

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