NDR Santander Urbanski Gerhaher

Decepcionante batuta

Santander. 21/08/2018. Festival Internacional de Santander. Obras de Gustav Mahler y Johannes Brahms. Christian Gerhaher, barítono. NDR Elbphilharmonie Orchester. Dir. musical: Krzysztof Urbanski.

La Novena de Mahler de Rattle y la London Symphony Orchestra había situado el listón muy alto en Santander, la pasada semana. Pero a buen seguro no fue ese listón lo que marcó como decepcionante la actuación de la NDR Elbphilharmonie Orchester de Hamburgo. A decir verdad, lo que decepcionó no fue la orquesta sino la batuta de Krzysztof Urbanski, de una banalidad alarmante.

Y es que hay conciertos en los que no pasa nada, por mucho que sobre el papel haya ingredientes para todo lo contrario. Así apenas alcanzó Christian Gerhaher a elevar el nivel de la velada, con un Mahler elegante y expresivo, plagado de sonidos trascendentes y etéreos. Magistral liederista, como nos tiene acostumbrados, su "Ulricht" fue para enmarcar, como en general toda la selección de canciones de Des Knaben Wunderhorn.

Y a decir verdad fue Gerhaher lo único que se pudo salvar de esta velada. Y es una lástima, porque la orquesta de Hamburgo tiene muy buenos mimbres, como ha demostrado estos años con quien fuera su titular hasta la temporada pasada, Thomas Hengelbrock. En cambio, el joven maestro polaco Krzysztof Urbanski dirigió de una manera sumamente anónima y muy poco estimulante. 

El Adagio de la Décima de Mahler -partitura poca atinada para abrir un concierto, dicho sea de paso- sonó gris y mortecino, sin claridad alguna, deshilachado y caído de tensión. Cabía presagiar lo peor, tal y como confirmó después un Brahms plano y sin aliento alguno en el fraseo. Apenas se advirtió algo de inspiración en el Adagio, delineado no obstante con excesivo amaneramiento. Poco duró la inspiración, pues, disuelta en el alboroto general que presidió la ejecución del cuarto movimiento de esta Sinfonía no.  2 de Brahms. Muy decepcionante labor de Urbanski pues en el podio, lastrando un concierto que contaba con músicos capaces de llegar a mucho mejor puerto.