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Miércoles de cámara: Agosto 2020

26 de agosto. Juan Crisóstomo de Arriaga: Cuarteto para cuerda nº2; por La Ritirata.

El bilbaíno Juan Crisóstomo de Arriaga, considerado el Mozart español y fallecido tempranamente, dejó escritos tres maravillosos cuartetos de cuerda que el grupo La Ritirata plasmó en disco de forma excepcional. Publicados en torno a 1824 y dedicados a Cherubini, su maestro de contrapunto en el Conservatorio de París, junto a Baillot (violín) o Fétis (armonía), escuchamos hoy el segundo de ellos, a medio camino entre Mozart y Beethoven. ¡Feliz escucha! 

19 de agosto. Edward Elgar: Salut d'amour; por Kyung Wha Chung y Kevin Kenner.

Todo un regalo de amor. Salut d'amour para violín y piano fue el regalo que compuso Elgar para su compromiso con Caroline Alice Roberts, en 1888. Ella le contestó con un poema: The Wind at Dawn (El viento al amanecer), al que el compositor puso música inmediatamente. En la dedicatoria de la partitura de Salut, se podía leer "À Carice", un nombre que unía los de su futuro y el que más tarde acabarían poniendo a su propia hija. ¡Feliz escucha!

12 de agosto. Louis Spohr: Doble cuarteto nº1, op.65; por Jascha Heifetz, Gregor Piatigorsky, Paul Rosenthal, Allan Harshman, Israel Baker, Milton Thomas y Pierre Amoyal

Una pléyade de grandes instrumentistas, encabezados por Jascha Heifetz y Gregor Piatigorsky, dan vida a este curioso Doble cuarteto para cuerdas nº1 de Louis Spohr. Fue el primero de los cuatro que compuso con esta fórmula, además de casi multiplicar por diez sus composiciones para cuarteto de cuerda "sencillo". Ocho grandes intérpretes, agrupados en dos conjuntos de cuatro, que interaccionan de manera brillante, en un homenaje a un héroe de la época... y de ahora: Mozart. ¡Feliz escucha!

05 de agosto. George Friedrich Haendel: Concerto grosso, op.6 nº1; Akademie für Alte Musik Berlin.

En poco más de un mes, Haendel amplió su propia colección de concerti grossi. De seis, pasaron a 12 más, los Opus 6; que hoy escuchamos con el primero de ellos como ejemplo de la gran maestría del compositor más allá de sus conocidas óperas y oratorios... aunque los utilizase a modo de interludio en estos últimos (y este primero incorpore borradores de su ópera Imeneo en el primer movimiento). Ecos a la manera de Corelli (el maestro del concerto grosso), formas sonata, movimientos danzables, unos ingeniosos allegros finales... ¡Feliz escucha!