beethoven sonatas arpegio 1

En el momento justo

Las sonatas para piano de Ludwig van Beethoven. Paul Badura-Skoda y Jörg Demus. Editorial Arpegio. Barcelona, 2019.

La nueva edición en castellano de Las sonatas para piano de Ludwig van Beethoven, firmadas por Paul Badura Skoda y Jörg Demus no aporta nada de relieve a las ediciones ya existentes en otros idiomas excepto, evidentemente, eso mismo, la traducción al castellano, que no termina de ser en esta ocasión todo lo redonda que uno podría esperar, desde la construcción de las frases hasta la elección de ciertos aspectos técnicos. Por lo demás, como el erróneo prólogo comienza diciendo, seguramente estas líneas que leen aquí no sean más que una enumeración de contenido, sin enfoque crítico de alto nivel y contenedoras nada más que de una información palmaria, pero son las que la mayoría de gente elige para leer entre los medios especializados. Que alguien con el historial de quien firma el prólogo se permita hablar de tal manera sí dice mucho de la realidad que viven los medios de clásica en este país. No puede haber estética sin ética y Arpegio debería cuidar mejor tanto sus portadas como el contenido propio.

Pero ese es otro tema y mejor centrarnos en la oportunidad de leer en castellano un libro que, con permiso del siempre clarividente y todopoderoso Charles Rosen, surge como único en el catálogo Beethoviano. Paul Badura-Skoda y Jörg Demus carecen quizá de la didáctica de Rosen, pero desde luego ganan en la hondura de la pragmática y la reflexión, también de la poética, siendo dos de los grandes pianistas europeos de sus días (ambos nos han dejado recientemente). Tan grandes que tras su muerte, muchos que desconocían incluso su nombre ahora corren a descubrírnoslos, marcando este texto como imprescindible. Ya me entienden. Y de verdad que lo que Demus y Badura-Skoda escriben, merece mucho la pena. Este libro llega en el momento justo, preparado para la celebración del 250 aniversario del compositor (originalmente se publicó a raíz de una gran gira de los pianistas por el 200 aniversario, en 1970) y cuando ambos han decidido entonar Les Adieux.

Las 32 sonatas para teclado del genio de Bonn son desgranadas aquí una por una, indicándonos quién escribe sobre cual, pues no hay un texto común, con una introducción a las tres últimas en las que no aparece firma, aunque deduzco que se trata de Demus. Se suma a todas ellas una visión sobre las tres sonatas sin opus y una suerte de corolario final de Skoda sobre la interpretación beethoviana, publicada realmente con anterioridad a todo lo comentado, en 1962.

Líneas cargadas de comunicatividad, de proximidad y literatura (se recogen poemas de Claudius, fragmentos de Shakespeare…), del verdadero aliento de quienes se emocionan ante ellas leyéndolas al piano que, unidas a las numerosas  muestras de las partituras y al relato propio de los autores, incidiendo en las fuentes, conexiones y contextos de Bethoven, crean una unión muy directa con el lector, sea o no pianista, sea un gran melómano o no. Beethoven fue Beethoven y sus circunstancias. Después de él, fueron las circunstancias de cada uno, uno mismo... y Beethoven.