© Angel Chevresti.
La sustancia que paralizó el Met ayer por la noche, las cenizas de un difunto
Ayer por la noche, el último acto de la ópera Guillaume Tell de Rossini tuvo que ser cancelado al observar algunos testigos como un hombre arrojaba una sustancia en polvo sospechosa al foso de la orquesta durante el descanso. Ante la incertidumbre, el Metropolitan Opera optó por cancelar lo que quedaba de ópera, así como la siguiente función prevista, también de Rossini: L'Italiana in Algeri.
Horas más tarde la policía, desplazada hasta el teatro neoyorquino y según las declaraciones del hombre que arrojó la sustancia, ha confirmado que se trata de las cenizas de un difunto. El joyero y amante de la ópera tejano Roger Kaiser cumplía así con la última voluntad de un querido amigo y la policía no ha presentado cargos contra él. Por su parte el intendente del Met, Peter Gelb, ha declarado que se estudia como reubicar a todos los espectadores en otras funciones de Guillaume Tell para que puedan terminar de ver la ópera. Quitando gravedad al asunto ha pedido al público que deje sus cenizas en casa.
