Una grave crisis institucional amenaza el futuro del Maggio Musicale en Florencia
La dimisión de Fabio Luisi podría ser la guinda a una escalada de severos desencuentros institucionales
La inestasbilidad en el seno del Maggio Musicale Fiorentino va camino de amenazar incluso la propia viabilidad de la institución en un futuro inmediato. La dimisión de Fabio Luisi como director musical titular, apenas un año después de su nombramiento, es la gota que colma un vaso que ha venido llenándose a base de numerosos desencuentros entre la política y la gerencia de este emblemático centro musical italiano.
Si bien el viernes pasado Dario Nardella, alcalde de Florencia, había manifestado su intención de permanecer en su cargo como presidente de la Fundación Maggio Musicale Fiorentino, desmintiendo delegar su responsabilidad en el polémico político Salvatore Nastasi -un hombre de Renzi-, dos días después sin embargo terminó haciéndolo, confirmando además a Cristiano Chiarot como sovrintendente del MMF. El lunes de esta semana el propio Nardella manifestaba, en una nueva contradicción, que Chiarot no podría ser reconfirmado por cuestiones de edad (sic).
Estos vaivenes han desatado una auténtica tormenta entre el personal del MMF y sus abonados, confiados en el buen rumbo que la institución había alcanzado durante los últimos años. Chiarot declaró en un primer momento su disposición de continuar en el cargo, recibiendo el respaldo del mismísimo Zubin Mehta. Pero más tarde, a tenor de las declaraciones del alcade de Florencia, confirmó que pondría fin a su mandato el próximo 28 de julio. La dimisión de Fabio Luisi es así la puntilla para una institución que venía viviendo años felices y que ahora contempla cómo la política en las alturas se apodera de su devenir artístico.
