mejor 2019 platea magazine

Lo mejor de 2019: Protagonistas, óperas, conciertos y productos editoriales que han marcado el año

 

JAVIER DEL OLIVO


PRODUCTO EDITORIAL: VV.AA. El libro de la música clásica. Ediciones Akal.

Lo que primero impacta de este libro es el atrevido y atrayente diseño (debido al equipo de Studio 8), que engancha desde el principio. Es el típico libro, por su imagen, que en cuanto lo hojeas en una librería, te llama la atención: sus colores, sus dibujos, su maquetación, si bien no diferentes ni novedosos, sí son poco habituales en los libros de música clásica. Pero todo eso se quedaría en humo si cuando entras a analizar los contenidos estos no respondieran a las expectativas. En absoluto. Este libro combina, de una manera sorprendente, la imagen atractiva, el resumen conciso y claro, y el rigor científico y musical. Es una historia de la música clásica desde la época medieval hasta la música contemporánea, estructurada en multitud de apartados que permiten multitud de lecturas: desde la habitual, a la transversal, sirviendo de consulta de un tema concreto (pues dispone de un buen índice) o de un periodo musical más general.

ÓPERA: Salome en el Festival de verano de la Bayerische Oper de Munich con Marlis Petersen y Kirill Petrenko.

Salome es sin duda una obra emblemática dentro del repertorio y una de las obras maestras que nos legó Richard Strauss. La versión que estrenó este verano dentro de su Festival la Bayerische Staatsoper muniquesa demostró una vez más la calidad que brinda esta institución, uno de los teatros (por no decir el más) destacado del panorama internacional. Fue una combinación perfecta integrada por una intérprete en estado de gracia: Marlis Petersen. Un director consagrado y que ya entrado en la historia: Kirill Petrenko y una puesta en escena que firmaba Krzysztof Warlikowski que no deja indiferente a nadie y que profundiza en el drama tan bien adaptado de Oscar Wilde por el propio compositor.

RECITAL / CONCIERTO: Recital de lied a cargo de Ian Bostridge y Julius Drake en la Schubertiada de Schwarzenberg.

El asistir a los conciertos que se programan dentro de la Schubertiada de Schwarzenberg puede considerarse, sin duda, una experiencia religiosa. Porque el Angelica Kauffmann Saal es como una pequeña iglesia donde se rinde culto al mundo del lied y la música de cámara con un respeto y una calidad que no creo que tenga parangón en el resto de festivales de este tipo. Concretamente el concierto del que hablo giró en torno a tres autores excepcionales (Schubert, Henze, Mahler) en los que cantante y pianista dieron lo mejor de sí, que es mucho, ya que nos encontramos ante dos representantes punteros de este género tan querido por mí.

PROTAGONISTA 2019: El movimiento MeToo.

Todos los que nos movemos alrededor del mundo de la música clásica no podemos obviar cómo el legítimo movimiento que ha surgido en todo el mundo reivindicando los derechos de la mujer ha entrado como un huracán en los teatros, en los auditorios y en las carreras musicales. Si bien este movimiento en otros ámbitos ya venía de atrás, ha sido este 2019 en el que con más virulencia e impacto se ha notado en la clásica. No voy a recordar, porque están en la memoria de todos, los casos que ha habido en nuestro mundo. Esperemos que se llegue a erradicar cualquier práctica que haga daño a las personas, sea del tipo que sea esta práctica, y el respeto hacia todos sea ley, no sólo en la música sino en todos los aspectos de la vida.

 

ENRIQUE BERT


PRODUCTO EDITORIAL: Isidoro Fagoaga, el tenor olvidado, de Germán Ereña Minguez.

Que un pequeño ayuntamiento se ponga manos a la obra dispuesto a financiar la publicación de un libro que trate de recuperar la figura de un tenor por muchos olvidado y que, producto de tal esfuerzo, se edite una obra cargada de datos biográficos, artísticos y fichas complementarias de la vida personal y artística de Isidoro Fagoaga (1893-1976) ha sido todo un hallazgo. Así, el pueblo navarro de Bera, casi en la frontera con Guipúzcoa, nos ha regalado esta obra que es un compendio imprescindible para conocer a un grande de la lírica, un tenor que ahora está un poco menos olvidado.

ÓPERA: Einstein on the Beach, de Philip Glass. Teatro Arriaga de Bilbao.

Obra vivida por un servidor durante muchos años exclusivamente a través del disco, el Teatro Arriaga nos dio a finales de mayo la oportunidad de vivir una experiencia casi mística al asistir a la versión concertante de la primera gran obra escénica de Philip Glass, Einstein on the Beach. Reconozco que viajé lleno de dudas por eso de la estética minimalista llevada al extremo pero también que salí satisfecho como pocas veces, consciente de haber presenciado un alarde continuo de precisión y calidad técnica en las voces del Collegium Vocale Gent y del Ictus Ensemble. Aún recuerdo mi cara de asombro e incredulidad al termino de una larga función que me dio una nueva lección de lo diversa y, por ello, satisfactoria que puede ser la ópera.

CONCIERTO: The Tallis Scholars. Semana de Música Antigua de Lizarra/Estella.

De nuevo la victoria de la música pura a través de la simplicidad. El concierto, la construcción de una nueva misa de Giovanni Pierluigi de Palestrina a través de cinco fragmentos de otras tantas misas del compositor. Y complementando el experimento, autores como Cristóbal de Morales, Josquín des Pres o Gregorio Allegri, cuyo Miserere en la interpretación de The Tallis Scholars queda guardado en mi oído, en mi cerebro por los tiempos de los tiempos. No hay teatro ni iglesia pequeña. Hay artistas enormes. Y Festivales hechos con fundamento.

PROTAGONISTA 2019: La Asociación Lírica Luis Mariano, de Irun.

Estoy convencido de que muchos melómanos se echarían las manos a la cabeza al descubrir las condiciones en las que cuatro locos de Irun decidieron crear una temporada operística, que este año próximo cumplirá su XX edición: limitada orquesta, inexistencia de foso, carencias escénicas evidentes, coro amateur y un largo etcétera. Sí, todos ellos son problemas objetivos pero, ¿tiene precio la ilusión? Y cada una de las funciones, a la que podríamos sacar muchos fallos, no es sino reflejo de la ilusión de esta tribu de mohicanos líricos. Y que dure.

 

JORDI MADDALENO


PRODUCTO EDITORIAL: Lise Davidsen: Album debut DECCA / Der Freischütz (Pentatone).

La soprano noruega fue mi elección del año 2018 como talento emergente incuestionable. Este 2019 ha demostrado que es la voz del presente y del futuro que muchos estaban esperando para un repertorio siempre árido de grandes voces. Tiene un instrumento que es como una aurora boreal, denso, de extensión inabarcable, poderoso y capaz de colorear y dar matices más allá de lo impactante de su corporeidad. Dos ejemplos fantásticos: su álbum debut pera DECCA con Wagner y Strauss, dos compositores que se adecuan a su talento natural como un guante y la preciosa Agathe de su primera ópera grabada en estudio, un Freischütz de equipo más que notable y batuta experta en el que ella destaca como la poderosa gema vocal que es.

ÓPERA: Tannhäuser nueva producción del Bayreuther Festspiele 2019.

Aunque muchos se empeñen en afirmar que el Festival de Bayreuth vive una decadencia más que notable bajo la dirección de la bisnietísima Katharina Wagner, lo cierto es que las últimas producciones estrenadas allí desde el bicentenario del 2013, el Ring de Castorf, o la premiada Meistersinger de Kosky, desmienten la tiña que muchos desprenden contra su criterio. Este 2019 Bayreuth volvió a ser protagonista gracias al fulgurante estreno del Tannhäuser firmado por Tobias Kratzer. Una dirección de escena imaginativa, llena de humor, si, eso de lo que dicen que la música de Wagner no acepta, pasen y hagan un doble round con el Meistersinger de Kosky y este Tannhäuser delirante y luego opinen. Nunca había escuchado tantas risas en la Verde Colina, Krätzer no solo consigue refrescar la teatralidad de la ópera, sino que lleva su arte fuera del Festspielhaus con un happening protagonizado por una Drag Queen en medio de los jardines, rompiendo la cuarta pared y señalando el siglo XXI del este centenario Festival. ¡Una maravilla!

RECITAL / CONCIERTO: El Beethoven de Jordi Savall. Inicio de su integral en el Auditori.

Jordi Savall vive una envidiable madurez artística en el podio frente a una orquesta de músicos excelsos, Le Concert des Nations con nombres invaluables como el concertino Jakob Lehmann, o Luca Guglielmi y Manfredo Kraemer como asistentes de dirección. La modernidad, frescura y vitalidad de la música de Beethoven le sientan genial a la visión experta y trascendente de un Jordi Savall que esta firmando una integral de las sinfonías de Beethoven en el Auditori inolvidables. Después de unas fantásticas 1ª, 2ª, 3ª, 4ª y 5ª, Este 2020 servirá en primavera la 6ª y la 7ª y en otoño la 8ª y la 9ª, apúntelo en el calendario porque no se arrepentirán.

PROTAGONISTA 2019: El caso Plácido Domingo.

Por una vez y sin que sirva de precedente, Plácido Domingo ha sido el protagonista indeseado de un 2019 que no olvidaremos. La sonadas acusasiones, que no denuncias, por abuso de poder y acoso sexual han revolucionado no solo el mundo de la clásica y la ópera, sino que como en el caso Weinstein, originario del movimiento Metoo, ha trascendido más allá de cualquier ámbito. El caso no está cerrado, su efecto en los medios y el uso de la noticia a nivel prensa y redes sociales será digno de estudiar en sociología y la posición de Plácido Domingo como persona ha quedado en entredicho. Con todas sus actuaciones en los EE. UU. canceladas en contraste con las europeas, donde cada actuación ha servido para que la aparente mayoría del público le aplauda en reconocimiento a una presunción de inocencia que no todos comparten. Una noticia en desarrollo que no deja indiferente a nadie.

 

DIEGO A. CIVILOTTI


PRODUCTO EDITORIAL: Cuarteto Casals. Beethoven: The Complete String Quartets, vol. II

Tras “Inventions”, “Revelations” aborda el segundo volumen de este ciclo tan ambicioso como irresistible, donde el Casals logra dibujar un mundo sonoro hondo y profundamente humano desde su visión de la integral beethoveniana de cuartetos de cuerda.  Honestidad interpretativa, precisión deslumbrante y visión personal se ponen al servicio de una interpretación verdaderamente antológica, y lo hace con un concepto que permite descubrir las entrañas de la propia evolución creativa del compositor de Bonn. No es aventurado sostener que cuando necesitemos discriminar entre el ramillete de integrales, presentes o pasadas, esta que culmina el Cuarteto Casals deberá ocupar un lugar en el contexto europeo. Todo eso, por supuesto merece ser presentado en un envase que esté a la altura, y tanto la edición como la grabación en los estudios Teldex de Berlín, lo está. Vaya si lo está.   

ÓPERALa doncella de Orleans de Tchaikovsky en el Theater an der Wien.

Una velada que resultó una sorpresa agradable, superando todas las expectativas en orquesta y concepto escénico. En primer lugar, una Sinfónica de Viena comandada por la ucraniana Oksana Lyniv que brilló en todos los registros, eligiendo un Tchaikovsky acorde con la propuesta escénica, agresivo y expresionista. Esta corrió a cargo de Lotte de Beer, que triunfó donde fracasó más tarde en el Liceu con Los pescadores de Perlas. Fuera de toda arbitrariedad subjetiva, desde una inteligente y fina aprehensión hermenéutica, enriqueció el contenido dramático de la ópera precisamente donde esta muestra mayores carencias: en la interioridad psicológica de la historia y del personaje principal.

CONCIERTO: Salonen dirige la Novena Sinfonía de Mahler en el Palau.

La visita de la Philharmonia Orchestra al Palau de la Música Catalana el pasado mes de octubre, fue rotunda e inspiradora. La batuta de Esa-Pekka Salonen estaba al frente, con un bagaje de una década a sus espaldas. En los atriles, la Novena de Mahler. Ingredientes suficientes, dirán, para que el plato fuera de buen gusto. Sin embargo eso no lo asegura, y en este caso fue una noche de música en mayúsculas. Amén del virtuosismo orquestal, un Mahler interesante por su radical modernidad y madurez de concepto, en una recreación que trazó un mundo complejo, atravesado por múltiples referencias, mostrando sus fragilidades y evaporándose, con suavidad pero sin vacilar. Sincero en el sonido y rotundo en el silencio, el paso de la orquesta y de Salonen por la sala catalana, fue sin duda una de las citas más brillantes del año.

PROTAGONISTA 2019: Orquestra Simfònica Camera Musicae.

Hace unos años hablaban de cierta orquesta catalana como un “milagro mediterráneo”. Se equivocaban de orquesta. Si una merece ese apelativo, y este 2019 ha sido el año de su confirmación, es la Orquesta Sinfónica Camera Musicae. Y es que en los últimos tres años, desde la conmemoración de sus primeros diez años, este proyecto sinfónico ha crecido a pasos agigantados. Se ha esmerado en darse a conocer, pero además ha ido confirmando las expectativas generadas. Sin ir más lejos, en la apertura de la temporada 2019/20, con una rotunda Primera de Mahler. Como ya he dicho y no me canso de hacer, un caso de estudio por su forma de organizarse y mantener la divisa de un proyecto artístico joven que ha sabido implicar a sus miembros. Y lo que les queda por crecer.  

 

ALEJANDRO MARTÍNEZ


PRODUCTO EDITORIAL: Sinfonías Beethoven - Wiener Philharmoniker & Andris Nelsons.

A las vistas del año Beethoven, en ocasión del 250 aniversario del compositor, parecía difícil sumar una nueva grabación relevante de sus sinfonías. Pero el maestro letón Andris Nelsons ha logrado llevar al disco una versión muy emocionante de estas partituras, con una Filarmónica de Viena en estado de gracia. Pude estar en Viena para la grabación en vivo de la Novena, en el transcurso de una tanda de conciertos, y los epítetos se agotarían para glosar la experiencia de vivir esa música en la mítica sala del Musikverein. 

 
ÓPERA: Die Tote Stadt, Bayerische Staatsoper.
 
Pocas veces todo, pero absolutamente todo, confluye de manera redonda y precisa en una misma representación. Escena, foso y voces, todo al unísono, alimentando un plano al otro, de una manera que no dejaba tregua, apabullante, emocionante. Parecía increíble y se antoja difícilmente de repetir.
 
CONCIERTO: Cuarta sinfonía de Mahler con Mariss Jansons. Salzburgo, Festival de Pascua.
 
Ha habido muchos conciertos memorables este año, pero emocionalmente no puedo sino volver ahora a la inolvidable Cuarta de Mahler que Mariss Jansons dirigió en Salzburgo, en el Festival de Pascua, al frente de la Staatskapelle de Dresde. Fallecido recientemente, el maestro letón demostró con su Mahler hasta qué punto se encontraba en lo más alto de su dilatada trayectoria. Sensibilidad, espiritualidad, genialidad… Uno de mis últimos conciertos con Jansons y por ello mismo, un recuerdo ya imborrable.
 
PROTAGONISTA 2019: Javier Camarena.

El año 2019 ha supuesto la confirmación definitiva y absoluta de Javier Camarena como el rey de los tenores. Su proyección sigue siendo infinita, pero su realidad se impone ya de una manera incontestable. Su aquilatado belcanto supera todas las expectativas. El tenor mexicano baila con lo imposible, de tú a tú, saliendo airoso de cada nueva prueba. La lírica necesita cantantes de leyenda y Camarena ha venido para forjar la suya.
 

GONZALO LAHOZ


 
PRODUCTO EDITORIAL: Igor Levit. Integral de sontas para piano de Beethoven. Sony.

En un presente donde la importancia de lo físico (así como concepto general) cada día pierde más adeptos y más encuentros, especialmente en el mercado discográfico, la integral de sonatas para piano de Beethoven que ha completado Igor Levit en Sony, es el cúlmen de las cosas bien hechas. Dan ganas de llorar de puro gozo viendo el formato, los detalles, el cuidado. Y uno acaba llorando cuando escucha disco a disco, esa manera de desgranar una idea tan personal como respetuosa con el compositor. Un piano sutil, elegante y conciso, que siempre parece estar en la búsqueda de la reflexión. Un pianista excepcional en una grabación exquisita.

ÓPERA: Mirentxu, de Guridi, con Ainhoa Arteta y Óliver Díaz en el Teatro de la Zarzuela.

¿Quizá podría haber escogido algo de apariencia más trascendental, más intenso, más moderno? Quizá, pero es que recordando todo lo que he escuchado este año, la Mirentxu de Guridi en el Teatro de la Zarzuela es la función que más me ha hecho llorar de emoción. Literalmente, desde su comienzo hasta su final. Esperaba recomponerme en el intermedio, pero la función se realizó sin pausa, como mi congoja. Llorar ante la belleza de una música maravillosa, la de Guridi, llevada por gesto experto como es el de Óliver Díaz, comprobando el maravillosísimo trabajo que ha realizado al frente de la Orquesta de la Comunidad de Madrid, de exponencial evolución bajo su batuta. Llorar ante el Coro del Teatro de la Zarzuela, que es maravilla. Llorar ante lo que significa que hoy, en 2019, podamos escuchar esta obra en su euskera original, en Madrid, entre ovaciones y aplausos, que es algo que a uno le pone la piel de gallina. Todas las heridas, sobre todo las que son más impuestas que reales, sanan.

RECITAL / CONCIERTO: Oedipus Rex, de Stravinsky. Orquesta y Coro Nacionales de España. Josep Pons, dirección.

Josep Pons es un músico y una persona, porque se puede ser todo a la vez, maravilloso. Este año le ha sido otorgada la Medalla de Bellas Artes y la Universidad Autónoma de Barcelona ha anunciado que será investido Doctor Honoris Causa. No sin razón, desde luego. Al frente de la Orquesta y Coro Nacionales de España, que continúan viviendo un momento estupendo, dirigió un Oedipus Rex de Stravinsky glorioso. Pons desmenuza cada color y lo dota de luz (¿qué son los colores sino luz?), lo eleva... y nos emociona. "¡Espectadores, regocijémonos! ¡Nos han arrancado los ojos, nos han regalado los oídos!", escribí en su momento. 

PROTAGONISTA 2019: Ellas.

Ha llegado el momento. El momento lleva llegando mucho tiempo, en realidad. Pero hasta aquí, ya se ha de decir y han dicho "basta". También en la clásica y a todos los niveles, comprometiendo a todos los agentes que, de un modo u otro, formamos parte de ella. La música, la clásica, el arte también les pertenece a las mujeres. No como imagen inspiradora en el concepto machista de musa, sino como intérpretes, como creadoras, como gestoras, como músicas. Y les ha de pertenecer al mismo nivel que le pertenece a los hombres: de forma libre; sin miedos, sin vergüenzas, sin abusos. Y nosotros los hombres a su lado, respetándolas, compartiendo, disfrutando de su trabajo y de su arte sin ningún prejuicio, sin complejo. Tratándonos de igual a igual. El futuro (y el presente) será feminista, o no será.