PORTADA DISCO JUDITH JÁUREGUI DIE ROMANTISCHE SEELE

Judith Jáuregui dedica su nuevo disco a Clara Wieck y Robert Schumann

Este mes de junio, la pianista Judith Jáuregui lanzará  su último disco Die romantische Seele  (El alma romántica), con música de Clara Wieck (Schumann) y Robert Schumann, editado por el sello alemán ARS Produktion. Con el Concierto para piano y orquesta de Schumann, una de las cimas del repertorio para piano y orquesta grabado junto a la Orquestra Simfònica Camera Musicae, bajo la dirección de su titular Tomás Grau, y tres piezas para piano solo, el disco recoge la intensa profunda unión de dos de los autores más importantes de la historia de la música. Con ellos vuelve la artista al romanticismo más puro y a uno de los compositores que más le han marcado en su trayectoria.

Con su nuevo disco Judith Jáuregui expresa en plenitud su fuerte conexión emocional  y vital con Robert Schumann, quien ya fue protagonista de su primer trabajo discográfico hace casi diez años. “La música de Schumann fue una de las primeras músicas que conocí siendo niña, prácticamente comencé a leer en el instrumento con su Álbum de la Juventud. Así que puede decirse que en música, Schumann sería mi lengua materna, y mi primer idioma emocional - declara Judith  -.  Ha pasado casi una década desde mi primer disco, en la que he ahondado en otros autores y épocas y ahora, con ‘El alma romántica’, siento que vuelvo a mi origen”, explica la pianista.

Judith Jáuregui y la Orquestra Simfònica Camera Musicae grabaron Die romantische Seele en noviembre de 2019, tras finalizar una gira en conjunto en otoño de ese año. “Ha sido muy bonito grabar con la Orquestra Simfònica Camera Musicae y su maestro titular, Tomàs Grau – explica Judith - . Desde que nos conocimos hace unos años tocando Beethoven conectamos muy bien. Justo antes de grabar realizamos una gira con el Concierto de Schumann por diferentes salas de España, entre ellas el Auditorio Nacional de Madrid, así que cuando llegamos a la grabación ya teníamos una respiración y un concepto creado. La experiencia por tanto fue fluida, de tomas largas y la vivimos con naturalidad divirtiéndonos por poder volver a hacer música juntos.

 

 

Después de la emoción compartida con la orquesta disfruté también de la grabación de las piezas de piano solo, de volver a la introspección y soledad del instrumento en estas obras que pese a su forma no demasiado grande, atestiguan la llama intensa de sus autores”, concluye la pianista.

Orquesta y solista interpretan el Concierto para piano y orquesta en La menor, Op. 54 en los primeros 35 minutos del disco, trabajo que se completa con la interpretación de Judith de solos de piano tanto de Robert como de Clara: Quasi variazioni: Andantino de Clara Wieck, de Robert; Variaciones sobre un tema de Robert Schumann op. 20, de Clara; y finalmente de nuevo Robert, con, Arabeske en do mayor op. 18. “Las dos primeras están escritas en modo menor así que escogí el Do mayor del Arabeske op. 18, la tonalidad de la simplicidad y la pureza, para despedir el disco con su luz y esperanza”, puntualiza Judith.

A la hora de seleccionar el repertorio del disco y desde su profundo vínculo con Robert Schumann, Judith ha considerado imprescindible también la presencia de Clara para transmitir el alma romántica. “No se puede imaginar a Robert sin Clara, ni a Clara sin Robert. De ahí que haya querido unir la música de ambos y reflejar su fiel unión en una selección de obras que nacieron de la inspiración mutua. La vida y obra de ambos representan ‘el alma romántica’, y su relación contiene los ideales del momento: amor, pasión, sensibilidad, intensidad, respeto, libertad, vitalidad, entrega, luz, oscuridad, alegría y también sufrimiento”.

Foto: Ars Produktion.