Concerto 1700: "Brunetti fue uno de los autores más respetados en el Madrid del siglo XVIII"
Al hilo de su reciente grabación consagrada a los divertimenti de Gaetano Brunetti, conversamos con los principales integrantes del conjunto Concerto 1700, en concreto con el trío de intérpretes que han grabado estas piezas: Daniel Pinteño (violín), Ester Domingo (violonchelo) e Isabel Juárez (viola).
Tras el álbum consagrado a Literes, con el contratenor Carlos Mena, presentan ahora su cuarto álbum con Concerto 1700, bajo su propio sello discográfico además. ¿Cuándo y cómo se gestó este proyecto de grabación? Creo que se grabó en el verano de 2020, tan marcado por el auge de la pandemia.
Daniel Pinteño: Este proyecto discográfico se gestó antes de la pandemia. En 2019 los musicólogos de la Asociación Ars Hispana me habían mostrado esta colección de tríos y tras leerlos tranquilamente en casa pude constatar lo buena que era la música así que decidí organizar unos ensayos para hacer una selección que reflejara la diversidad formal y tonal que hay en esta colección. El confinamiento paralizó un poco el proyecto pero tras el mismo, y gracias al apoyo de la Comunidad de Madrid, me lancé a organizar la grabación. Tuvimos meses intensos de ensayos y finalmente pudimos grabarlo en agosto de 2020. Estamos muy satisfechos con el resultado y cada vez que tocamos esta música en concierto constatamos la buena acogida que tiene entre el público.
A diferencia de Luigi Boccherini, la figura de Gaetano Brunetti sigue siendo hoy la de un desconocido para el gran público, algo menos si acaso para los amantes de la música antigua y el Barroco. Y sin embargo tiene una vinculación muy estrecha con la vida musical española, en el Madrid de la mitad del siglo XVIII. ¿Por qué es relevante su figura, hasta el punto de consagrarle por entero un CD?
Ester Domingo: Brunetti fue uno de los compositores más respetados de Madrid durante las últimas tres décadas del siglo XVIII. Probablemente fue el compositor predilecto de Carlos IV y claramente ocupó una posición preeminente dentro de la corte española durante gran parte de su carrera, pero hoy día su música apenas se conoce o interpreta. Para nosotros resultaba imprescindible recuperar la música de tan relevante figura y además colocarla dentro del panorama del clasicismo europeo, tal y como merece.
Isabel Juárez: Hay que decir también que tiene una enorme producción de música de cámara con su sello personal, aún dentro de un estilo que está al corriente de lo que se componía en Europa. Estos tríos son un soplo de aire fresco que esperamos que contribuyan a la renovación de un canon de la música de cámara del Clasicismo un tanto encorsetado.
El repertorio que han grabado son sus divertimenti, tríos para violín, viola y violonchelo. ¿Qué tienen de particular estas partituras, esta forma musical tan concreta? ¿Cuál es su carácter? Entiendo que son piezas de aire ligero pero elegante, aunque no necesariamente.
Isabel Juárez: Que se llamen divertimenti no implica necesariamente que sean de carácter ligero, sino que se refiere más a la finalidad con la que fueron concebidos. Parece ser que al duque de Alba le gustaba tocar la viola en veladas de música de cámara, así que Brunetti le habría compuesto estos tríos para este fin. Desde luego es un propósito más informal que por ejemplo el de la sonata de viola, que compuso para un examen de oposición a la Capilla Real, pero eso no significa que no haya momentos musicales con un carácter más solemne como el primer movimiento del trío L130, o nostálgico, como puede ser el trío L136. ¡Eso sí, la elegancia nunca la pierde!
Creo que los materiales originales estaban en el Palacio de Liria de Madrid, que ardió en 1936; por lo que se tuvo que recurrir a una copia preservada en la Staatsbibliothek de Berlín. Si no me equivoco, estamos ante la primera grabación de estas obras a nivel mundial.
Daniel Pinteño: En efecto estamos ante la primera grabación de esta selección de divertimenti. Estas tres series permanecieron en una copia en Berlín, como bien indica. El periplo de las obras de Brunetti tras su muerte varía. Hay muchas que están aquí pero hay otras tantas que traspasaron los Pirineos y han acabado en países como Francia, Suiza o Alemania. Esto hace que los musicólogos tengan que desarrollar un trabajo en ocasiones detectivesco en busca de músicas que parecían perdidas y añade aún más valor a esta grabación. Por nuestra parte seguiremos trabajando el terreno de la música de cámara en próximas entregas discográficas. Nos encanta este repertorio y encaja perfectamente con este pilar fundamental para Concerto 1700 que es la recuperación y difusión de nuestro patrimonio musical.
La figura del XII Duque De Alba parece determinante en la historia y gestación de estas obras. ¿Qué papel jugó y cuál fue su relación de mecenazgo con Brunetti?
Ester Domingo: A la muerte del duque, en 1776, se inventariaron todos los instrumentos y obras musicales que poseía, contando más de un centenar de obras de Brunetti, un número mayor que el de ningún otro compositor. Está claro que al XII Duque De Alba le gustaba la música de Brunetti y por lo tanto, le debió encargar obras en varias ocasiones.
Daniel Pinteño: Como bien señala Ester, el Duque de Alba, que fue dedicatario de estos divertimenti, fue uno de los personajes ilustrados más importantes del siglo XVIII español. Por lo que sabemos era un músico diletante con especial atención por la viola y el violín así que con toda seguridad estas obras las pudo interpretar el propio duque en alguna de esas veladas ilustradas junto a obras de otros compositores de la época como Boccherini, Herrando o Scarlatti.
Foto: © Ana C. Mejía / Nace Fotografía