JOSETXU OBREGÓN foto Pablo F Juárez

Josetxu Obregón: "La Música Antigua ha vivido un cambio de paradigma que ya no tiene vuelta atrás"

Tras recibir el Premio FestClásica, el violonchelista Josetxu Obregún y su agrupación La Ritirata llevarán la música de Francesco Mancini (Festeggiando Mancini) por toda España, en conjunción con el programa a chelo solo CelloEvolution que interpretará el músico bilbaíno tras presentar su último disco, de mismo título. En total, más de 20 citas ya programadas para lo que queda de año, con presencia en los principales festivales de verano de nuestro país. De todo ello hablamos con él.

Su agenda de conciertos para este verano es impresionante, ¡casi es más fácil decir dónde no va a estar!

(Risas). Sí, la verdad es que hemos tenido la suerte de que nos concedieran el premio Sello FestClásica, de la Asociación Española de Festivales de Música Clásica y que engloba, por tanto, a muchos de ellos: Quincena de San Sebastián, Festival de Santander, Torroella de Montgrí... El resultado es una gira estupenda, yendo por todas partes con el mismo programa. Es el sueño que siempre quieres cumplir y nunca consigues: poder hacer un programa y repetirlo en bastantes ocasiones. De esta manera puedes profundizar en la música al mismo tiempo que reduces costes y logística. Está muy bien pensado, es como cuando se hace una ópera, que la misma producción se repite en varios sitios... parece algo obvio, que sin embargo no se suele dar en los conciertos.

Y la difusión, que entiendo se multiplica exponencialmente.

Absolutamente. Todo es más fluído y así podemos llegar a más puntos en un periodo reducido de tiempo. A principios de julio realizaremos un primer bloque grande de ensayos y después, digamos, iremos realizando ensayos generales, con la lección más que aprendida. En este aspecto, yo le veo todo ventajas a este sistema, me parece una gozada disfrutar así del premio de FestClásica. No obstante, sí que creo que deberíamos alcanzar un punto medio. Lo que sería estupendo es que los distintos festivales se aunaran cada verano para poder hacer pequeñas giras con tu música. No le digo que cada grupo tenga que tocar en 17 citas como va a ser nuestro caso, pero sería fantástico si pudieramos tocar en cuatro, cinco, seis festivales distintos cada verano.

¿Los festivales son el bastión para la Música Antigua y las agrupaciones historicistas?

Sí. Hay un empuje muy fuerte en la Música Antigua gracias a los festivales. Tanto los de verano como los que se van sucediendo a lo largo de todo el año. Tradicionalmente, en nuestro país y otros muchos lugares de Europa, esa es la idea y el concepto. Reunir todo este tipo de música en torno a un par de semanas en cada lugar. ¡También hay temporadas contínuas! Como el Universo Barroco del CNDM, las Sociedades Filarmónicas... pero, sí, el núcleo fuerte de la Música Antigua se sucede a través de los festivales.

¿Qué programa presentan, pues, durante este verano?

Lo hemos titulado Festeggiando Mancini, celebrando la figura del compositor napolitano Francesco Mancini. Ya le habíamos prestado atención anteriormente, porque nos ha gustado desde un principio. De los autores napolitanos siempre nos quedamos con los más conocidos, como Alessandro Scarlatti, Porpora, Leo... Mancini, en popularidad, se queda un poco en la retaguardia, pero es un compositor muy interesante. Tiene música estupenda: muchísimas óperas prácticamente desconocidas, por ejemplo. En este caso, nos hemos centrado en su música instrumental. La cuestión es que La Ritirata está a punto de cumplir 15 años desde su formación y en la víspera se celebran los 350 años de Mancini. Ya que en nuestras primeras giras realizamos concicertos con música de Mancini y que hace unos años publicamos un disco, Neapolitan Concerto, donde también incluíamos su música, hemos querido regresar a él y centrarnos en su figura. En el programa pueden escucharse varias oberturas de sus óperas o cantatas, conciertos para flauta... hemos querido situar a Mancini en su lugar.

¿Quién era Mancini, a grandes rasgos? ¿Tiene relevancia de peso en el violonchelo?

Mancini es una figura sorprendente, que estuvo en el vicerreinato de España en Nápoles como Maestro de Capilla y profesor de Alessandro Scarlatti. Respecto al chelo, no tiene una relación tan directa, puesto que no escribe música solista para el instrumento, aunque sí que le da partes muy interesantes dentro de mucha de su música de gran formato. Ha sido más conocido a través de la flauta, donde tiene música muy buena y ha gozado siempre de buena fama. Alguna de esta música se puede escuchar en el programa. Por lo demás, tiene una música, ya digo, totalmente interesante. Por ejemplo el repertorio habitual napolitano, con orquestación de dos violines y continuo. En algunas obras, como las óperas, introduce la orquestación de Venecia con una viola, enriqueciendo armónicamente su escritura. Busca un juego de voces muy interesante, que también interpretamos durante este verano.

Es un programa bastante diverso, entiendo.

Efectivamente. Hay un aria de una ópera que hago yo al violonchelo, también un concierto para flauta, o una obertura de una ópera donde el violín primero es el que brilla. Hemos buscado la mayor variedad dentro de su música, aunque la única limitación es que, al no ser un programa vocal, nos queda toda esa parte pendiente. Es algo que algún día haremos, porque tiene música fantástica. 

¿Podría acabar esta idea de programa trasvasándose a disco?

Sí, ¿por qué no? Este es un programa totalmente inédito e incluso hay una obertura de una cantata, Care mura beate, que es primera recuperación histórica en tiempos modernos. Ahora mismo no hay un plan inmediato de grabación, pero sí es verdad que vamos a tocarlo mucho y veremos cómo funciona. No descartamos la grabación.

Al mismo tiempo, este verano se podrá seguir disfrutando de su programa a solo: CelloEvolution.

Sí, es la continuación al lanzamiento de mi último disco, del mismo nombre, que salió hace unos meses. Ha sido, después de muchos discos con La Ritirata, mi primer disco a chelo solo y me hacía una especial ilusión, desde hace mucho tiempo. Es un programa de concierto que ha ido evolucionando, porque yo siempre he tocado, claro está, las Suites de Bach, como hace todo chelista que se dedique a esto. No obstante, siempre me ha interesado mucho, también toda la evolución del violonchelo desde el Seicento hasta la figura del compositor. Cómo cambia el chelo y la forma de escribir la música para él. No olvidemos que el violonchelo surge para acompañar, como bajo contiuo y en la Capella de San Petronio, en Bologna, aparecen los primeros ejemplos de compositores que escriben para chelo solo. ¡Una novedad total! En unas pocas décadas su música evoluciona mucho y en nada estamos ante la figura de Bach en Cöthen, escribiendo las seis Suites para violonchelo, lo más grande que se ha escrito para el instrumento en toda la historia.

¿Ha recogido en CelloEvolution, digamos, el punto de ebullición del chelo como instrumento solista?

¡Eso! Le di mil vueltas a cómo organizar el disco. Grabar las Suites como tales, enteras, ya se ha hecho muchas veces y, sin duda, en algún momento de mi vida es algo que haré, pero en este caso he tratado de ir y venir. Crear una especia de suite enorme donde están representadas las seis Suites de Bach, cada una de ellas con un movimiento, alternándolas con movimientos afines de otros autores del Seicento. De esta manera, si hay una que tiene aspecto de giga, escuchamos a continuación la Giga de la Tercera de Bach, o si hay una con forma cierta tonalidad, busco esa misma en la pieza siguiente. Que tonalmente funcione y que la estructura del todo tenga sentido para el oyente. Es una apuesta diferente a lo habitual, pero estoy muy contento de haberlo podido llevar a disco.

Encuentro la propuesta ya no sólo necesaria artísticamente, sino también pedagógicamente hablando.

Era un poco la idea. Acercar este momento a los oyentes que no están muy habituados a este repertorio... ¡y que puedan disfrutarlo! Siendo sincero, si hubiese hecho un disco monográfico de la música del Seicento para violonchelo solo, hubiese sido duro para quien no esté dentro de este "mundillo". Era música muy sencilla, ¡no es Bach! Y alternar todo ello, como también hago en cada concierto, me parece lo más interesante y lo que mejor funciona para todo el mundo. Dota de gran variedad a la escucha... y sí, con ese caríz pedagógico de poder asomarse a lo que estaba sucediendo en aquel momento concreto. 

Entiendo que en la técnica también será un compendio de cómo tocar el violonchelo.

¡Claro! Una cosa que encuentro muy interesante, por ejemplo, es que en cada lugar el chelo se afinaba de forma diferente en cada lugar. No hablo ya de que en cada ciudad el diapasón fuera distinto, que también, sino, además, las afinaciones entre las cuerdas eran diferentes. No todas las piezas del disco están afinadas igual, sino que he ido afinándolas según lo requerido. Por ejemplo, había un recurso que era bajar la afinación del La al Sol, que es lo que hace Bach en su quinta Suite como recuerdo a este chelo arcaico... y al unirlo todo, coge una homogeneización auditiva muy interesante.

Hablamos de la evolución del violonchelo, de 15 años de La Ritirata... ¿Hay alguna evolución, algún desarrollo personal en su instrumento?

Sí, yo creo que sí. Es indudable que algo ha de haber cambiado en todo este tiempo. Si le soy sincero, al principio de La Ritirata yo venía de estudiar chelo moderno en España y me fui a Holanda a estudiar chelo barroco. Empiezo a trabajar con nombres como Christina Pluhar y L'Arpeggiata... En medio de todo aquello, me pusieron como primer chelo en la European Union Baroque Orchestra y se me abrió un poco un mundo. Necesitaba buscar mi propia forma de expresarme, de querer decir las cosas. Es entonces cuando fundo La Ritirata.... ¡pero al principio yo no pensaba que fuera a tener la trayectoria que ha tenido finalmente! Lo hice con toda la seriedad del mundo, pero uno nunca sabe. Ahora que miro retrospectiva, estoy muy contento de lo que hemos hecho. Muchísimas cosas las hubiese hecho de forma diferente, seguro, pero es síntoma de que hemos evolucionado. Cambias, adquieres diferentes puntos de vista, no es que ahora hagamos música mejor ni peor, pero maduras y evolucionas... ¡es la experiencia vital!

Desde su punto de vista, ¿qué momento vive la interpretación historicista de la Música Antigua? No sé si ha pasado de un movimiento a un paradigma, o si incluso ya se ha superado ese momento...

Ciertamente, a grandes rasgos y con mucha distancia, es algo comenzó siendo visto como una cosa de frikis, cuando empezó en Holanda. Hace 15 años, cuando yo hablaba con colegas de interpretación moderna, me miraban como si fuera algo súper raro, como un grupo de frustrados, mal vistos. Y ahora, sin embargo, la Música Antigua no es que esté bien vista, es que está muy de moda. El peligro de la música historicista es recuperar por recuperar. Hay mucha música que, en realidad, a lo mejor está bien olvidada. Puede ser interesante estudiarla, practicarla, ensayarla e incluso ofrecer un concierto con ella, pero puede que no tenga un mayor recorrido. Hay que tener la mente fría para no obsesionarse. Y por otro lado, lo bueno que ha tenido todo esto es que ha nadie se le ocurre hoy en día ponerse a tocar Bach con un violonchelo o una orquesta sinfónica intentando hacer música "a lo grande", con un gran vibrato y demás (risas). Te dediques a lo que te dediques a la música: Antigua, moderna... cada estilo se ha situado en su sitio, y eso es lo más importante. Al final, lo que importa, es que la Música Antigua ha vivido un cambio de paradigma que ya no tiene vuelta atrás, afortunadamente. ¡Y más en nuestro país! Donde cada vez hay más gente joven que la interpreta... ¡y cada vez mejor! Algo hemos tenido que hacer bien en los últimos años, porque los grupos españoles no tienen nada que envidiar al resto de colegas europeos... y a su vez, estos están llenos de intérpretes españoles.

Foto: Pablo F. Juárez.