Buenos augurios
16/08/2025. Canònica de Santa Maria de Vilabertran. Elionor Martínez (soprano), Ferran Albrich (baríton) y Victoria Guerrero (piano). Obras de Schubert, Fauré, Viardot, Debussy y Toldrà.
Para estrenar esta nueva edición de la Schubertíada de Vilabertran se optó por voces de la casa, lo que no significa en absoluto que el producto que se ofreció fuera de estar por casa. No solo Elionor Martínez y Ferran Albrich exhibieron grandes capacidades sinó que, al piano, Victoria Guerrero mereció también su éxito personal. Ambos cantantes han participado en ediciones anteriores en el programa formativo 'Lied the Future' y son, por lo tanto, cantantes jóvenes.
El repertorio elegido para el caso cumplía con el necesario tributo a Schubert en la primera parte para dedicar la segunda parte a compositores franceses (Gabriel Fauré, Pauline Viardot y Claude Debussy) y finalmente una tanda de hasta nueve canciones de Eduard Toldrà, en catalán y en castellano.

En la primera parte los dos cantantes se fueron alternando, lo cual hasta cierto punto perjudica la concentración general. Abrió Albrich con An den Mond y expuso con claridad el producto: un estilo liederístico clásico y ortodoxo, con bellos sonidos aflautados apoyados en el paladar, buen fraseo y dominio de la partitura. Más adelante no se sentiria tan cómodo en el caràcter agitado de Der Schiffer pero pudo exhibir unas medias voces preciosas en Nachtstück y algun agudo un tanto abierto en An mein Herz. Su legato, precioso en toda la velada, destacó poderosamente en Die Sommernacht y en Am Bach im Frühling enfrentó la reexposición del temacon gran clase.
La vocalidad de Elionor Martínez y su estilo liederístico no son, en cambio, tan ortodoxos. Ello dio lugar a momentos de gran expresividad junto con algun detalle vocalmente discutible. La voz lució carnosa y atractiva en An die Nachtigall, y junto a ello hubo cierta tendencia al sonido fijo que afectó puntualmente a la entonación. Nada de eso le impidió cantar con una muy loable concentración en el texto y las dinámicas en Die junge Nonne. En Nacht und Träume ofreció una 'messa di voce' levemente calante pero un enfoque expresivo excelente que también le permitió redondear un Ganymed muy convincente.

Mientras todo esto sucedía Victoria Guerrero se dedicó a crear un contexto ideal para los cantantes, con gran musicalidad, dominio del instrumento y alguna cosita más, como su excelente acompañamiento en Im Frühling, la introducción encomiable de Nachtstück y bellos momentos en Nacht und Träume y Ganymed, por ejemplo. Al final de esta primera parte cerraron con un duo (Licht und Liebe) estupendamente conjuntado, circunstancia que también se dio ya en la segunda parte con la Rêverie de Pauline Viardot.
Las virtudes y capacidades mostradas en la primera parte se mantuvieron inalterables en la segunda, en la que cabe destacar el desempeño de la pianista en el libro I de las Fêtes galantes de Debussy y en la Cançó de vela de Toldrà, el gran fraseo de la soprano en la tercera pieza del mencionado libro I y también en Cocorococ! de Toldrà, la clara dicción del barítono en Debussy y Toldrà y una excelente 'voce spiegata' en Debussy por su parte.
La sesión se cerró con una propina a duo del propio Toldrà que consistía en un arreglo de Jordi Doménech para dos voces de Maig. Éxito merecido y buenos augurios para lo que queda de festival.

Fotos: © Schubertíada